Existen en el mercado muchos tipos y muy variados de inversores con distintas configuraciones de la etapa de potencia. No obstante, están diseñados para trabajar, o bien conectados a la red eléctrica o bien alimentando cargas aisladas.

En efecto, todos los inversores generan una onda (normalmente senoidal) a partir de una señal continua. Sin embargo, las características de esa onda así como el control necesario para su generación varían según la aplicación que se le vaya a dar al inversor. Si se va a conectar a la red eléctrica, el valor eficaz de la misma y su frecuencia vienen impuestos por la red y la calidad de la onda tiene unos requerimientos normativos. Y el parámetro que puede controlar el inversor es el factor de potencia mediante, por ejemplo, la relación de potencias activa y reactiva. Además, la onda generada debe ser sincronizada con la de la red al conectar el inversor. Y si se va a usar para abastecer cargas aisladas, tiene que ser el inversor el que mantenga el valor eficaz y la frecuencia de la onda de tensión y la calidad requerida de la forma de onda depende de la carga conectada al inversor, pero en cualquier caso es menos exigente que en el modo conexión a red.

El control asociado a ambos usos y los requerimientos de forma de onda son por tanto, muy distintos. Las variables a controlar en ambos casos son las mismas, pero la estrategia de control completamente distinta. En ambos casos se actúa sobre las mismas variables pero en cada caso los efectos son distintos y por tanto también su control. Por ese motivo, es importante diferenciar claramente las condiciones de trabajo y evitar la superposición de los controles.

Tradicionalmente, a partir del valor de las magnitudes de entrada en el control (que dependen de las condiciones de trabajo), se calcula una onda de referencia (de tensión o de intensidad según la configuración del inversor) y se proporcionan las órdenes de conmutación para su seguimiento por la etapa de potencia (con un control, por ejemplo, por banda de histéresis, vectorial, etc.), comparando la forma de onda real con la de referencia calculada. Ese control con señal de referencia es poco adecuado para englobar la operación del inversor conectado a red y de forma aislada porque el control global tiene que poder variar, además de la forma de onda, la magnitud a controlar. Además, a nuestro modo de ver, este modo de trabajo no permite utilizar todo el potencial de los inversores (de las etapas de potencia), que podrían generar las señales directamente a partir de unos pocos parámetros, que serían en este caso el resultado del control implementado.

Además, los inversores comerciales trabajan a la frecuencia nominal (50 Hz en unos países y 60 Hz en otros). Pero, que los inventores sepan, no hay ningún inversor que pueda trabajar de las dos formas (conectado a red eléctrica o de forma aislada) o a frecuencias distintas de los valores nominales.

• Diseño y construcción de la etapa de potencia.
• Diseño y construcción del circuito acondicionador de la onda de salida de la etapa de potencia (un filtro LC).
• Implementación del módulo de generación de las señales de disparo de la etapa de potencia a partir de unos parámetros de entrada.
• Diseño y construcción del módulo de comunicaciones y control remoto que determina los parámetros de entrada al circuito de generación de disparos o permite su especificación de forma remota.
• Implementación de la interfaz de usuario que, instalada en cualquier dispositivo con acceso a red de comunicaciones (ordenador, Tablet, Smartphone, etc.), permite, a través del módulo de comunicaciones, controlar de forma remota el inversor.
• Diseño y construcción del módulo de control que, en caso de que sea activado en la interfaz de usuario, regula los distintos parámetros para que sigan una determinada ley. Por ejemplo mantener la tensión en un valor de consigna determinado.
• Diseño y construcción del módulo de medida del valor eficaz de la tensión de salida.
• Diseño y construcción del módulo de medida de la tensión de entrada.
• Diseño y construcción del módulo de control que, en caso de sea activado en la interfaz de usuario, sigue el punto de máxima potencia de la instalación fotovoltaica a la que tiene que estar conectado el inversor para activar esta opción.
• Puesta a punto del sistema completo.
• Realización de las pruebas.